-
“La incidencia de asma en España puede llegar hasta el 20% según las edades”
-
La alergia y el asma ha crecido mucho en los últimos años, sobre todo entre los niños.
-
Entrevista con la doctora Ana María Plaza, presidenta de la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica
Si quieres también puedes escuchar la entrevista en el radio podcast de ‘Saber más’.
La alergia es una patología que afecta a los que la padecen durante todo el año y que puede desembocar en otras afecciones como asma. Además, no sólo se da en los adultos ya que hay muchos niños que la sufren, de hecho, uno de cada cinco niños es alérgico. Para conocer más el tema de la alergia y la forma en que ésta influye en los más pequeños, ‘Saber Más’ entrevista a la doctora Ana María Plaza, presidenta de la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (SEICAP).
En primer lugar decíamos que uno de cada cinco niños es alérgico, esto es mucho, parece que cada día los datos indican que hay más niños alérgicos ¿Cuáles son las principales razones por las que hemos llegado a este punto?
La alergia tiene un condicionante genético, éste no lo podemos variar puesto que es una carga genética familiar. Pero también, la alergia está influenciada por otras muchas situaciones como, por ejemplo, el medio ambiente en el cual viven los niños, los alimentos a los cuales están expuestos, las infecciones que el niño pasa… o sea que hay muchos condicionantes que, sobre todo, en países industrializados como el nuestro hacen que la patología alérgica, la enfermedad alérgica, tenga más desarrollo, se caracterice más y se exprese más.
En los países industrializados como el nuestro, la enfermedad alérgica tiene más desarrollo”
¿Y cuáles son esos factores? Alguna vez se ha comentado que el exceso de higiene tiene algo que ver.
Más que el exceso de higiene sería decir, por ejemplo, el sistema inmune. El sistema de nuestras defensas tiene una capacidad de respuesta, entonces claro, si el niño está en un ambiente muy higiénico, muy limpio, muy puro, padece muy pocas infecciones y no tiene que actuar contra otros elementos, pues el condicionante genético o la carga genética que tiene este niño se puede expresar más. No es que el estar en un ambiente muy limpio dé lugar a patología alérgica, sino que el propio sistema defensivo del organismo tiene más posibilidades de expresarse. Pero se puede expresar igual en otra situación en la cual la higiene no sea tanta.
En el cuerpo del niño, sobre todo cuando está en crecimiento, el sistema inmunitario necesita entrenarse para luego enfrentarse a esas infecciones ¿y es ahí dónde se producen de alguna manera esos problemas?
Se produce un disbalance, si el niño tiene muchas infecciones pues el sistema inmunológico tiene que actuar sobre estas infecciones. Entonces aunque tenga posibilidad de desarrollar una respuesta alérgica, posiblemente o no la desarrolla o la desarrolla mucho menor. Si el niño está en un ambiente más industrializado, de países industrializados, una de las características es que puede dar lugar a mayor expresión de su potencial alérgico. Pero no es el único porque, por ejemplo, la contaminación de las grandes ciudades, también influye a favor de que se exprese más la enfermedad alérgica.
La contaminación de las grandes ciudad favorece la expresión de la enfermedad alérgica”
¿Y hay diferencias y datos que diferencian a los niños del campo y los de la ciudad, por ejemplo, hablando de contaminación?
Sí, hay algunos estudios en los cuales se ha visto que los niños criados en el campo no desarrollan tanta patología alérgica. Su posibilidad de ser alérgicos podríamos decir es la misma, pero el dar lugar a la enfermedad es menor. De todas maneras estos estudios son difíciles de llevar a cabo y no todos los condicionantes del campo actúan a favor. Se ha visto que estar en contacto con animales, según cuales, actúa a favor de que esto prevenga enfermedades alérgicas y otros no.
¿Y los alimentos?
La alimentación también puede influir totalmente en el desarrollo de patología alérgica. Lo que actualmente se preconiza es potenciar la lactancia materna exclusiva, si es posible, los primeros meses de vida. Si puede ser hasta los 4 meses que el niño tome sólo lactancia materna, única y exclusivamente lactancia materna. Sin que la madre haga ninguna dieta especial, la madre tiene que comer lo habitual y seguir la lactancia materna. Esto no asegura que el niño no pueda desarrollar una enfermedad alérgica pero sí que parece que previene algo. Y luego potenciar, alargar un poco más de lo que se hacía hace unos años la lactancia materna, si es posible como mínimo hasta los 6 meses, haciendo la introducción ya de los alimentos que recomienda el pediatra, muy progresivamente. Y si es posible que esta introducción sea mientras todavía el niño está tomando lactancia materna. Esto parece que es lo ideal para desarrollar menos alergias alimentarias, que se introduzcan los alimentos en pequeñas cantidades mientras el niño está tomando lactancia materna.
Cuando el niño ya crece un poco los padres tienen que decidir si lo llevan a una guardería, escuela infantil, etc. Y siempre está la duda de si el niño va a enfermar más. Esto a nivel de alergias ¿afecta que vayan a la guardería?
Pues sí, se ha visto que los hijos primogénitos, que no tienen ningún hermano mayor, tienen más posibilidades de desarrollar la enfermedad alérgica. Los siguientes hermanos, el segundo y desde luego el tercero y cuarto, menos porque los hermanos mayores les traen las infecciones. En el caso de la asistencia a guarderías, el niño está en contacto con procesos infecciosos y se va viendo que se va reduciendo la posibilidad de la expresión de la enfermedad alérgica, o sea que no desarrollan enfermedad alérgica. Claro estos son estudios de grandes cortes de muchos niños, entonces esto no quiere decir que tu niño, a pesar de ser el tercero y de ir a la guardería, no pueda tener una enfermedad alérgica. Pero en el conjunto de grandes cortes sí que se ha visto que disminuye la incidencia.
Llevar a los niños a la guardería disminuye la incidencia de las enfermedades alérgicas en ellos»
¿Y cuáles se ha visto que son las alergias más frecuentes en los niños?
Por un lado están las alergias medioambientales de donde vive el niño. Si el niño vive en un clima templado y húmedo puede desarrollar alergia por los ácaros, o si es muy húmedo por algún hongo ambiental. Pero si está en un clima muy seco y más bien con polen, pues éste puede desarrollar alergias respiratorias por alergia al polen. En el caso de los alimentos, depende mucho de la edad del niño. En los niños pequeños, en los lactantes, la alergia más frecuente, la primera alergia que se desarrolla es a proteínas de la leche de vaca, después la alergia al huevo. Pero si contamos toda la edad pediátrica es más frecuente, por ejemplo, la alergia al huevo que la alergia a proteínas de leche de vaca. Y si seguimos con el niño un poquito más crecido pues ya empieza la alergia al pescado, que sería la tercera frecuencia, y después ya las alergias a lo que todos son vegetales, frutos secos, frutas y cualquier vegetal. Éstas se desarrollan más hacia la segunda década de la vida o finales de la primera década. Sin embargo, en los dos primeros años prácticamente la única alergia alimentaria que vemos es a la leche de vaca, al huevo y alguno de ellos también al pescado. Pueden iniciarse también en los frutos secos pero esto no es lo habitual.
La alergia alimentaria más habitual en los primeros años de vida es a las proteínas de la leche de vaca”
¿También ha aumentado el asma?
Yo diría que el asma infantil, predominantemente o mayoritariamente, es de causa alérgica. La gran mayoría de asma o de rinitis que hay en los niños es de causa alérgica. Las rinitis pueden ser infecciosas en niños pequeños, pero desde luego con el asma seguro que es muchísimo más frecuente el asma alérgica, esto no es lo mismo en el adulto, hay mucha asma que no es alérgica. Entonces claro, la alergia juega un papel prevalente en todo lo que es patología respiratoria de tipo asma o incluso rinitis alérgica. Respecto a si ha aumentado la incidencia de asma, yo creo que esta se mantiene ya desde hace unos años. Es importante la incidencia en nuestro país, ronda según las edades hasta un 14, incluso hasta un 20%, pero esto se está manteniendo desde hace unos años. Es una frecuencia alta, la verdad.
Hablemos de los abordajes terapéuticos de la alergia. Por un lado, tenemos el tratamiento de los síntomas, antihistamínicos y demás, y, por otro lado, están las vacunas. Coméntanos los avances en cada uno de estos dos apartados y cuál es la relación entre uno y otro en la práctica actual de su especialidad.
En las patologías como el asma o la rinitis deben de coexistir los dos. Por un lado tenemos el tratamiento sintomático, si el niño tiene síntomas, ahogo por ejemplo, porque tiene asma, pues hay que darle un tratamiento para solucionarle este ahogo o estos pitos, estas sibilancias. También si tiene muchos estornudos, mucho moqueo o la nariz muy bloqueada por problemas alérgicos, pues habrá que darle un antihistamínico para aliviar estos síntomas. Esto solamente sería el tratamiento del momento de la crisis. Pero como la mayoría de estas patologías son alérgicas hay que hacer un estudio en profundidad de su causa alérgica y, si se puede y está indicado, se deben utilizar unas vacunas antialérgicas que son el tratamiento de la causa, causa que ha dado lugar a que esta enfermedad se manifieste. Por ejemplo, si tenemos un niño alérgico al polen del olivo y vive en una zona en la que hay muchos olivos, no le podemos evitar que cuando estos olivos polinizan el niño tenga síntomas. En esos momentos en los que tiene síntomas, hay que darle tratamiento para aliviarlos. Pero durante todo el año, habrá que estar vacunando a este niño para evitar que en la temporada siguiente tenga tantos síntomas, y que al cabo de un tiempo prudencial, de unos cuantos años de inmunoterapia específica para lo que el niño es alérgico, pueda convivir en la zona de olivos sin que el niño tenga síntomas. Y eso no quiere decir que el niño no siga siendo alérgico, el niño tiene una constitución alérgica que esta no se la vamos a poder variar , pero sí que le vamos a aliviar y variar totalmente sus síntomas alérgicos, que en este ejemplo que hemos expuesto, sería el asma por el polen del olivo.
¿La alergia no se cura?
El ser alérgico no, el ser alérgico es una carga genética. Es como la persona que tiene los ojos azules o la que los tiene marrones, le podremos poner unas lentillas de otro color, pero el color del ojo de esta persona es el que está condicionado genéticamente. Entonces, el ser alérgico es una condición genética pero esto no es condición de enfermedad. El ser alérgico no te asegura que tú seguro vas a tener una enfermedad alérgica, tú puedes ser alérgico y no desarrollar en toda tu vida una manifestación de enfermedad alérgica. Es difícil de entender.
Se puede ser alérgico y no desarrollar nunca una manifestación de enfermedad alérgica»
En cuanto a alergias alimentarias, ¿cuál es la diferencia entre alergia e intolerancia? Porque escuchamos muchas veces “tiene intolerancia a la lactosa” ¿es un tipo de alergia?
No, la intolerancia a la lactosa es una intolerancia. Entonces para que haya una respuesta alérgica necesitamos que el alimento que lo produce sea una proteína alimentaria. La lactosa, por ejemplo, es un azúcar entonces esto da una alteración en el sistema digestivo, en la digestión de este azúcar, pero no es una alergia. Puede dar síntomas parecidos porque dan síntomas digestivos. Los síntomas alérgicos debidos al alimento, habitualmente son más inmediatos en cuanto se ingiere el alimento. Aunque hay también alergias que pueden ser más tardías y, desde luego, siempre son síntomas debidos a una proteína alimenticia. Por ejemplo, la lactosa es un azúcar, pero la leche o proteínas de la leche tipo caseína, pues está sí que puede dar alergia. La diferencia clínica podríamos decir que lo que son intolerancias prácticamente sólo dan síntomas digestivos, habitualmente síntomas intestinales o síntomas que afectan al sistema digestivo, vómitos, flatulencias…Pero la alergia puede ir con síntomas digestivos pero tiene muchos otros síntomas cutáneos que normalmente son más inmediatos. Si son síntomas digestivos normalmente son vómitos muy inmediatos, síntomas respiratorios…Por ejemplo, por un alimento puedes tener también una rinitis muy importante o incluso sibilancias. Puedes llegar a tener el síntoma más grave de la alergia que es la reacción que afecta a varios órganos que es la anafilaxia, ésta es una reacción que tiene grados, pero que en el último de sus grados es de riesgo vital y esto es lo que asusta mucho a la población. Claro, no toda la población alérgica está afecta de anafilaxia alérgica.
Las alergia se diferencia de la intolerancia en que la primera está producida por una proteína y sus síntomas son mucho más inmediatos”
¿Cuándo debemos ir a un alergólogo? Y ya no sólo en el caso de los niños, sino me refiero a nivel general. Porque muchas veces los síntomas parecen un poco confusos.
Yo lo que siempre indico que hay que hacer es acudir al médico. Por ejemplo, ante una rinitis la persona que no está metida en medicina es lógico que no sepa distinguir si se trata de un resfriado común o de una rinitis alérgica, entonces si estos síntomas son muy repetitivos o parece que se resfría más de lo normal, pues debe acudir a su médico. En el caso de los niños hay que acudir al pediatra y será el pediatra el que indique el estudio, el si hay que acudir a un especialista de alergia pediátrica para hacer ya un estudio etiológico, un estudio de la causa…ver bien si esta patología puede ser alérgica o no, estudiar la causa, hacer un control de síntomas, un control evolutivo y ya poner el tratamiento preciso para el tema.
Muchas gracias por atender a ‘Saber Más. Noticias de salud y ciencia’.
Por Juan Antonio Ibáñez Cuenca
Si quieres también puedes escuchar la entrevista en el radio podcast de “Saber más”. Entrevista emitida en Valentia Radio
Pingback: qué produce las alergias